miércoles, 12 de octubre de 2011

"Laus Spaniae"


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“España como nación: un concepto discutido y discutible”. Como el tiempo ha demostrado, el protagonista de la desafortunada frase resultó ser un superlativo pufo que ha malogrado cualquier propuesta de futuro, dejando tras de sí una situación totalmente caótica a nivel internacional, económica y social.

El abandono de un proyecto común, consistente, diferenciado y estable en estos últimos años, es lo que genera enormmingote_zapatero_y_la_bola_del_mundo 2 06 2010es dudas sobre la actual realidad española. De la misma manera, ocasiona vacilaciones sobre nuestro pasado, a la vez que alimenta las grandes mentiras históricas en  algunas regiones, que se inventan hechos y gestas inexistentes y tergiversan los acontecimientos.

Sin un plan colectivo como nación no existen futuro. Debe ser un proyecto que se asiente sólidamente en nuestro pasado, en nuestros orígenes. Por ello,  resulta incompatible liderar y conducir España con una mínima duda sobre su pasado y su futuro, por lo que no debe extrañarnos la situación en la que nos encontramos.

Hoy, “Fiesta Nacional”, sería un buen momento para recordar desde cuando existe ese “concepto” llamado España (o “conceto”, como dicen otros); cuales son sus orígenes, cual es el punto de partida, el germen de nuestra identidad española.

pelayo Covadonga MadrazoLa mayoría de las respuestas nos conducirían a los Reyes Católicos. Es verdad que su matrimonio en 1469 unifica los dos grandes reinos peninsulares, pero quedan otros territorios fuera de la unión y estaríamos "formando" una nación de un suceso dinástico-hereditario. Del mismo modo, tampoco sería válido el final del poder musulmán con la toma de Granada en 1492, que significará la “vuelta” peninsular a la monarquía hispano-visigótica.

Otros citarían la batalla de Covadonga en el 722, como inicio legendario de la Reconquista, la lucha común de la Península contra el poder islámico. Habría quien señalaría 1812, como el inicio de la nación constitucionalista. Pero la identidad hispana es mucho más antigua y está claramente asociada a la denominada Era Hispánica.

A pesar de que los territorios cántabros y astures todavía no habían sido dominados, en el año 38 aC. el emperador Augusto declara la anexión definitiva de la Península Ibérica al Imperio Romano. Esta no es una fecha más de un decreto. Este momento será para todos los habitanteEdictos de la Península Ibérica un nexo común de identidad. Tanto es así, que en el s.III dC., esta fecha se emplea como referencia para datar los epígrafes y documentos peninsulares, sustituyendo o completando la que hasta el momento se venía citando en ellos: la fecha consular correspondiente o la ab urbe condita (la fundación de Roma).

La Era Hispánica resulta una seña de afinidad para todos los pueblos de la Península sin excepción, que se consideran, a pesar de sus diferencias, integrantes y poseedores de un mismo destino. Esta datación diferenciada de los habitantes de Hispania está tan arraigada en el pueblo, que los visigodos la asimilan y trasmiten a su vez a los reinos cristianos que surgen tras la invasión musulmana. En algunos casos permanecerá hasta el s. XV, si bien, desde el XII, se irá paulatinamente sustituyendo por el computo cristiano (-38 años).

La idea común de identidad de los pueblos hispanos no solo queda avalada por el empleo de esta datación durante más de doce siglos. Una de las obras de San Isidoro de Sevilla, concretamente, Historia de regibus Gothorum, Vandalorum et Suevorum, realizada en el 624, comienza con un prólogo titulado Laus Spaniae (Alabanza de España), en donde el obispo sevillano ensalza sus virtudes y en la que llega a emplear la expresión mater spaniae (la madre España):

san-isidoro-de-sevilla "Eres, oh España, la más hermosa de todas las tierras que se extienden del Occidente a la India; tierra bendita y siempre feliz en tus príncipes, madre de muchos pueblos. Eres con pleno derecho la reina de todas las provincias, pues de ti reciben luz el Oriente y el Occidente. Tú, honra y prez de todo el Orbe; tú, la porción más ilustre del globo. En tu suelo campea alegre y florece con exuberancia la fecundidad gloriosa del pueblo godo.

La pródiga naturaleza te ha dotado de toda clase de frutos. Eres rica en vacas, llena de fuerza, alegre en mieses. Te vistes con espigas, recibes sombra de olivos, te ciñes con vides. Eres florida en tus campos, frondosa en tus montes, llena de pesca en tus playas. No hay en el mundo región mejor situada que tú; ni te tuesta de ardor el sol estivo, ni llega a aterirte el rigor del invierno, sino que, circundada por ambiente templado, eres con blandos céfiros regalada. Cuanto hay, pues, de fecundo en los campos, de precioso en los metales, de hermoso y útil en los animales, lo produces tú. Tus ríos no van en zaga a los más famosos del orbe habitado.

Ni Alfeo iguala tus caballos, ni Clitumno tus boyadas; aunque el sagrado Alfeo, coronado de olímpicas palmas, dirija por los espacios sus veloces cuadrigas, y aunque Clitumno inmolara antiguamente en víctima capitolina, ingentes becerros. No ambicionas los espesos bosques de Etruria, ni admiras los plantíos de palmas de Holorco, ni envidias los carros alados, confiada en tus corceles. Eres fecunda por tus ríos; y graciosamente amarilla por tus torrentes auríferos, fuente de hermosa raza caballar. Tus vellones purpúreos dejan ruborizados a los de Tiro. En el interior de tus montes fulgura la piedra brillante, de jaspe y mármol, émula de los vivos colores del sol vecino.

Eres, pues, Oh, España, rica de hombres y de piedras preciosas y púrpura, abundante en gobernadores y hombres de Estado; tan opulenta en la educación de los príncipes, como bien dada en producirlos. Con razón puso en ti los ojos Roma, la cabeza del orbe; y aunque el valor romano vencedor, se desposó contigo, al fin el floreciente pueblo de los godos, después de haberte alcanzado, te arrebató y te armó, y goza de ti lleno de felicidad entre las regias ínfulas y en medio de abundantes riquezas."

Flores - España 
En este texto, San Isidoro desvela cual es el sentimiento de los pobladores de la Península Ibérica del s. VII. Es un canto, una alabanza a la tierra común, a España. Reconoce los distintos pueblos que la habitan, su clima extremo, sus playas, campos y montes; cita sus olivos, sus vides y su trigo ...  en definitiva, es la madre España.

Estamos apunto de dar por finalizado un periodo que resultaba difícil de imaginar. Solo el paso del tiempo nos dará la visión terrorífica de lo que ha pasado en el país durante estos últimos años. Gobierne quien gobierne próximamente, deberemos exigirles que pongan fin a la ineptitud, al revanchismo, a la corrupción y al sectarismo que ha imperado hasta ahora. Deberemos reclamar imperativamente la puesta en marcha de un proyecto común de futuro, un plan serio, austero, nacional, que logre superar definitivamente el caos social y económico existente. 





- Rojigualda.
- Mingote. Publicado en ABC 2011.
- Proclamación de D. Pelayo. Luis Madrazo.
- Edicto de Augusto año 15 aC.(Bronce de Bembibre).
- San Isidoro. Bartolé Esteban Murillo.
- Jardín, colores de España.
- VIDEO YouTube: fragmento de la película "Soldados Salamina" (Suspiros de España). Derechas42.